
odos alguna vez hemos sentido celos por nuestra pareja, y son completamente normales, ya que los celos surgen de una relación con otra persona que consideramos especial, en lo afectivo, en lo erótico etc.
Cuando nos enamoramos queremos acaparar la atención de la otra persona, las formas de comunicación, su tiempo, etc., lo cual es imposible ya que las diferentes actividades tanto de esa persona como de nosotros nos impiden la tarea.
Los celos surgen ante una sensación de amenaza, por creer que un aspecto del otro es compartido por una tercera persona, que en algún momento pueda privilegiarse de un sentimiento de amor en desmedro al proporcionado a nosotros.
Esta sensación de amenaza es condición fundamental de los celos y estos son una reacción frente a esa amenaza que se presenta ante nuestro objeto de amor.
Sin embargo; ¿si no se sienten celos, no se ama?, la respuesta dependerá del lector, pero hay que aclarar que estos son sentidos tanto por hombres y por mujeres, y que si bien son normales, todo tiene su límite.
En algunas ocasiones unos pequeños (nótese el pequeños) celos por la pareja, le puede hacer sentir halagado y querido sin embargo, cuando se traspasa este punto y se llega al hostigamiento, las riñas y el daño a la pareja y peor aun, a nosotros mismo, es cuando se dice que ya hay un problema, ya que en este punto los celos no demuestran cariño sino todo lo contrario.
Las personas celosas son inseguras, dependientes, con mucho miedo a la soledad y se pueden tornar agresivas debido a su control, necesidad de posesión hacia la pareja, al temor y desconfianza, y a la constante aprensión de la capacidad de retener a su pareja.